Frecuentemente nos convertimos en comerciantes, abogados, médicos, militares o panaderos siguiendo una tradición familiar de padre a hijo, pues existe lo que se llama una “lealtad familiar invisible”.
opias experiencias.
Esta herencia sigue generación tras generación, y seguimos pagando las deudas del pasado, mientras no se logre tomar consciencia de ellas.
Pues al volvernos conscientes de lo que está sucediendo, podemos terminar con esa lealtad invisible, que nos lleva a repetir las experiencias vividas por nuestros ancestros.
Esto indica que somos menos libres de lo que pensamos, pero podemos recuperar nuestra libertad, simplemente prestando atención a lo que nos sucede.
EJEMPLO:
Se trata de la tercera vez que me encuentro inmersa dentro del mismo problema.
Cuando me casé por primera vez, rápidamente terminé divorciándome pues no soportaba a mi marido. Para ese entonces ya teníamos dos hijos y tuve que realizar un gran esfuerzo de voluntad para juntar la fuerza para
irme, pero la razón fundamental es que él me hacia la vida imposible, no reparaba ningún desperfecto de nuestra casa y solo le entretenía reunirse con sus amigos. Realmente no entiendo como pude equivocarme tanto.
Apenas me divorcié lo encontré a Jose quien me fue presentado por mis amigas. Al instante me sentí muy bien con él pues fue sumamente tierno hasta que se animó a declararse.
Yo me brindé totalmente a él y todo anduvo bien en tanto que eramos simplemente una pareja de novios, entonces decidimos casarnos y todo recomenzó.
Casi inmediatamente él comenzó a no soportar a mis niños, hasta que finalmente terminé divorciándome (esta vez fue más fácil que la anterior)
Y entonces me quede sola durante más de cinco años hasta que lo conocí a Angelo.
Despues de algún tiempo de vida en común, nuestras relaciones sexuales se han espaciado más y más, lo cual me provoca un fuerte deseo de partir y darlo por terminado, que se pasa cuando finalmente vamos a la cama.
Cuando no se logran descubrir los orígenes transgeneracionales de los problemas de pareja, es imposible solucionarlos simplemente cambiando de pareja, pues lo que nos ha lleva a estropear la primera relación, estropeará las siguientes.
OTRO EJEMPLO
Hace 100 años, la abuela descubrió en el pequeño bosque cercano a su casa que dos de sus tres hijos habían sido devorados por los lobos, y sus cuerpos se encontraban esparcidos por el suelo totalmente destrozados.
En la siguiente generación el hijo sobreviviente tomó la profesión de carnicero, y realizaba su trabajo con tanto esmero, que no soportaba ver que un trozo de carne había sido mal cortado.
El hijo mayor del carnicero decidió convertirse en sastre de hombres volviéndose un especialista en la confección de trajes a medida.
En la siguiente generación uno de los descendientes se volvíó cirujano especializado en cirugía plástica reparadora y reconstitutiva, volviéndose un verdadero experto en la curación de los accidentados
La hermana de este hijo se volvió propietaria de un negocio especializado en la venta de cueros y pieles.
Y tal vez lo más interesante del caso, es que trabajando todos ellos en profesiones aparentemente diferentes,NINGUNO DE ELLOS LOGRÓ PROGRESAR ECONÓMICAMENTE, pues todos sus trabajos resultaron ser solo intentos inconscientes de reparar la muerte de los dos niños del bosque.
Un análisis o estudio transgeneracional no solo sirve para saber cómo era nuestro árbol familiar (pues para hacer esto no se necesita la ayuda de ningún especialista). El verdadero valor de un estudio de este tipo, consiste en lograr desbloquear las trabas producidas por las herencias inconscientes que sin darnos cuenta afectan nuestra salud, nuestras relaciones sociales, nuestro éxito laboral, y nuestras posibilidades de ser feliz en una relación de pareja
FuenteDr. Roberto A. Bonomi
Pues al volvernos conscientes de lo que está sucediendo, podemos terminar con esa lealtad invisible, que nos lleva a repetir las experiencias vividas por nuestros ancestros.
Esto indica que somos menos libres de lo que pensamos, pero podemos recuperar nuestra libertad, simplemente prestando atención a lo que nos sucede.
EJEMPLO:
Se trata de la tercera vez que me encuentro inmersa dentro del mismo problema.
Cuando me casé por primera vez, rápidamente terminé divorciándome pues no soportaba a mi marido. Para ese entonces ya teníamos dos hijos y tuve que realizar un gran esfuerzo de voluntad para juntar la fuerza para
irme, pero la razón fundamental es que él me hacia la vida imposible, no reparaba ningún desperfecto de nuestra casa y solo le entretenía reunirse con sus amigos. Realmente no entiendo como pude equivocarme tanto.
Apenas me divorcié lo encontré a Jose quien me fue presentado por mis amigas. Al instante me sentí muy bien con él pues fue sumamente tierno hasta que se animó a declararse.
Yo me brindé totalmente a él y todo anduvo bien en tanto que eramos simplemente una pareja de novios, entonces decidimos casarnos y todo recomenzó.
Casi inmediatamente él comenzó a no soportar a mis niños, hasta que finalmente terminé divorciándome (esta vez fue más fácil que la anterior)
Y entonces me quede sola durante más de cinco años hasta que lo conocí a Angelo.
Despues de algún tiempo de vida en común, nuestras relaciones sexuales se han espaciado más y más, lo cual me provoca un fuerte deseo de partir y darlo por terminado, que se pasa cuando finalmente vamos a la cama.
Cuando no se logran descubrir los orígenes transgeneracionales de los problemas de pareja, es imposible solucionarlos simplemente cambiando de pareja, pues lo que nos ha lleva a estropear la primera relación, estropeará las siguientes.
OTRO EJEMPLO
Hace 100 años, la abuela descubrió en el pequeño bosque cercano a su casa que dos de sus tres hijos habían sido devorados por los lobos, y sus cuerpos se encontraban esparcidos por el suelo totalmente destrozados.
En la siguiente generación el hijo sobreviviente tomó la profesión de carnicero, y realizaba su trabajo con tanto esmero, que no soportaba ver que un trozo de carne había sido mal cortado.
El hijo mayor del carnicero decidió convertirse en sastre de hombres volviéndose un especialista en la confección de trajes a medida.
En la siguiente generación uno de los descendientes se volvíó cirujano especializado en cirugía plástica reparadora y reconstitutiva, volviéndose un verdadero experto en la curación de los accidentados
La hermana de este hijo se volvió propietaria de un negocio especializado en la venta de cueros y pieles.
Y tal vez lo más interesante del caso, es que trabajando todos ellos en profesiones aparentemente diferentes,NINGUNO DE ELLOS LOGRÓ PROGRESAR ECONÓMICAMENTE, pues todos sus trabajos resultaron ser solo intentos inconscientes de reparar la muerte de los dos niños del bosque.
Un análisis o estudio transgeneracional no solo sirve para saber cómo era nuestro árbol familiar (pues para hacer esto no se necesita la ayuda de ningún especialista). El verdadero valor de un estudio de este tipo, consiste en lograr desbloquear las trabas producidas por las herencias inconscientes que sin darnos cuenta afectan nuestra salud, nuestras relaciones sociales, nuestro éxito laboral, y nuestras posibilidades de ser feliz en una relación de pareja
FuenteDr. Roberto A. Bonomi
